La industria española se enfrenta a una transformación profunda en su camino hacia la descarbonización. En este contexto, dos herramientas clave están ganando protagonismo: el biometano como sustituto del gas natural fósil, y los Certificados de Ahorro Energético (CAEs) como mecanismo de financiación y reconocimiento de medidas de eficiencia energética. La combinación de ambos puede acelerar la transición energética del sector industrial, reduciendo emisiones y costes operativos.
¿Cómo puede contribuir el biometano a la descarbonización de la industria?
El biometano es un gas renovable generado a partir de residuos (basura, residuos agrícolas o ganaderos,…), que puede distribuirse a través de la infraestructura de transporte de gas hasta cualquier industria.
El biometano es una solución a corto plazo para las empresas sujetas a la normativa EU ETS, ya que ofrece una vía estratégica para la transición del consumo de gas gris al verde o renovable.
Pero el impacto del biometano va más allá, al ser un pilar de la descarbonización y contribuir a la economía circular. Muchas empresas fuera de la normativa Eu ETS pueden encontrar en el biomatano un aliado clave pare mejorar su competitividad y alcanzar sus objetivos de descarbonización.
Financiación y competitividad: una oportunidad para la industria
Gracias a los CAEs, muchas empresas industriales pueden financiar total o parcialmente el CAPEX de sus proyectos de eficiencia energética, mejorando la rentabilidad del proyecto y acelerando la toma de decisiones.
La industria está siendo la gran protagonista del Sistema CAE hasta la fecha, acaparando el 64% de los ahorros de energía solicitados hasta el 31 de agosto de 2025. Esta financiación extra para implantar medidas de eficiencia energética permite mejorar la competitividad industrial y en paralelo, reducir las emisiones de CO2.
Del ahorro total solicitado en el sector industrial, el 57% proviene de 129 actuaciones singulares, no recogidas en ninguna ficha estandarizada de cálculo de ahorros. Para poder monetizar dichos ahorros ha sido necesario elaborar un plan de medida y verificación a partir de mediciones reales recogidas antes y después de implantar la medida.
El resto del ahorro capturado en el sector industrial (43%) se ha conseguido a partir de 770 proyectos de ahorro energético enmarcados en fichas estandarizadas como introducción de variadores de velocidad, sustitución de compresores o sustitución de plantas enfriadoras.
De todo ello hablaremos en el webinar que hemos programado para el próximo 21 de octubre en colaboración con Go2Markets, consultora energética que ayuda a las empresas industriales a incorporar gases renovables como el biometano en sus operaciones, facilitando también el acceso a certificados de gas verde.