Sabemos que la volatilidad es una constante en los mercados energéticos. En el caso del mercado gasista:
- Los precios del gas en el mercado europeo comenzaron el año alrededor de 50 €/MWh, bajando un 15 % para mediados de enero. Menos de un mes después, el 11 de febrero, subió a 59 €/MWh (una subida del 37 %) antes de desplomarse de nuevo un 38 % a 36 €/MWh el 7 de marzo.
- En junio, la escalada militar entre Israel, EE.UU. e Irán elevó los futuros del gas casi 5 % en un día, alcanzando los 41,9 €/MWh el 19 de junio, el nivel más alto desde abril. Cuando se anunció un alto el fuego, el 24 de junio, los precios europeos se desplomaron más de un 10 %, regresando a 36 €/MWh y, arrastrando consigo todo el mercado eléctrico de futuros.
Estas fluctuaciones tan bruscas de decenas de euros por MWh en cuestión de días ilustran los riesgos económicos que enfrentan los grandes consumidores de energía que tienen toda de su energía abierta a mercado.
En el caso del mercado eléctrico:
- Tal y como tiene sentido que ocurra, el precio de la electricidad sigue la misma dinámica del gas: el precio aritmético medio de OMIE España en el primer trimestre de 2025 alcanzó los 85.3 €/MWh, un 89.98% más que el mismo periodo del año anterior.
Estos movimientos recientes demuestran lo que está en juego: una variación del 30–40 % en semanas puede modificar completamente el margen operativo de una gran empresa. La pregunta es clara:
¿Es ahora buen momento para cerrar una cobertura de gas o electricidad?
En CREARA entendemos que operar en un mercado energético exige tomar decisiones con riesgos calculados. Por ello, hemos desarrollado y validado una metodología propia de cobertura de precios en gas y electricidad que permite a nuestros clientes anticiparse a las fluctuaciones del mercado y proteger sus presupuestos energéticos con precisión en todo momento.
Esta herramienta se basa en técnicas estadísticas avanzadas que permiten monitorizar en tiempo real el riesgo asumido por el volumen abierto a mercado. Utilizamos herramientas matemáticas como el Valor en Riesgo (VaR) para cuantificar ese riesgo en el presupuesto y establecer umbrales de actuación claros ante variaciones de cotización: precios objetivo, niveles de stop-loss y porcentajes de cierre para cada producto energético.
Ilustración 1: Análisis técnico del producto OMIP FTB Q4-25
Nuestro enfoque no se limita al análisis técnico y métodos estadísticos. Contamos con un equipo de expertos en mercados gasísticos y de electricidad que realizan un seguimiento continuo, aportando un análisis fundamental continuo, integrando variables macroeconómicas, geopolíticas y regulatorias que influyen directamente en la evolución de los precios. Esta combinación de análisis cuantitativo y cualitativo permite construir estrategias de cobertura robustas, adaptadas al perfil de consumo y tolerancia al riesgo, para de cada cliente.
El resultado es una herramienta de gestión que no solo minimiza la exposición a la volatilidad, sino que también permite capturar oportunidades de mercado sin asumir primas excesivas ni comprometer la estabilidad financiera de la organización.
Explicaremos este método en el webinar del próximo 17 de julio y 30 de septiembre. Puedes solicitar tu plaza desde la sección webinars de nuestra web.
